viernes, 15 de junio de 2018

EL CONSULTORIO DEL MAL

Muy buenas noches a todos, perdón por la tardanza. El relato de hoy se titula "El consultorio del mal".


Todo comenzó cuando tenía unas molestias en el estómago, eran tan fuertes las molestias que sentía en el estómago que fui con una amiga que me recomendó un buen doctor. Cogí el móvil y llamé a Jenny, le dije: -Jenny, necesito verte en cuanto antes, ire a verte a tu casa en estos momentos-.

Recuerdo que pasé por unos nuevos fraccionamientos en construccion que quedan cerca de las montañas donde vive Heidi de la Montaña y Hotaru no Bocho; seguí caminando y esquivando obstáculos en todo el camino hasta llegar a la casa de Jenny que esta custodiada por dos perros grandes, parecían traídos desde el mismo infierno pero no me dio importancia y le llamé, de pronto salió Jenny con su cabellera roja de furia, -¿esta lista?- le dije, -sí, ya vámonos- respondió. A los cuantos minutos cogimos el camión azul que nos llevó hasta la plaza cerca de la casa de Jenny, -mira es un doctor bueno, debes ir con él, pero ten cuidado porque es medio mañoso- dijo Jenny con cierto tono de advertencia, -yo sostuve una relación con él- añadió, -fue muy rica la relación con él, pero lo nuestro no se dio por que me queria tener atada, sumisa y obediente, eso conmigo no va, porque yo soy una fiera y no me gusta estar así- siguió, -pero ánimo, ve, él te ayudará, pero recuerda lo que te dije, yo estaré esperándote aquí afuera; entre 7:30 - 8 p.m. paso por tí-

Llegué entonces al consultorio, no se encontraba nadie excepto yo. El doctor abrió la puerta -pasa por favor- dijo con una voz gruesa algo tosca, -toma asiento, ¿en qué te puedo ayudar?- me dijo cuando entré a su consultorio, -es que tengo molestias en el estómago- respondí. Al mirarlo detenidamente logré ver que medía como 1,70m., no mal parecido, unos 50 años, buen cuerpo, un poco calvo, ojos borrados, blanco. 

Empecé a responder las preguntas que él me decía -abre la boca- indicábame, y la abría. Siguió haciendo las preguntas y las rutinas y me quedé pensando porqué me iba a tomar el pulso, y recordé que mi amiga Jenny me dijo que allí iba a empezar lo bueno... -Abre la mano, ciérrala, ábrela y cierra la otra- continuó. Me tomó el pulso, "creo que ya pasó lo peor...", pensé, ¡pero me equivoqué! Empezó a preguntarme si tenía novio y con cuántos hombres he estado, que si soy muy activa en mis relaciones, que si me cuido, y de quá tamaño la han tenido con los que he estado, y cuál es la más grande que he probado. Yo le contestaba pero no sabía el porqué de esas preguntas. 

-¿Tú ya has venido aquí conmigo verdad?, me dijo. 
-No, es la primera vez. 
-Ah... con que es tu primera vez...- prosiguió, haciendo una mueca siniestra. -cómo... ¿sabes cuándo alguien la tiene grande?- preguntó. 
-Sí, contesté. 
-¿Tú cómo sabes?
-Porque se les nota en el pantalón.
-¿Y yo cómo la tengo, grande o chica?, preguntó levantándose de la silla.

Yo me sorprendí porque era un doctor pero a la vez no tanto, porque mi amiga Jenny no me lo había dicho, 
-sí, la tiene grande- contesté 
-Tócala, mírala. 
-¿Puedo desabrochar su bragueta?
-Sí, haz lo que quieras.

Bajé su cierre, -¡Oh, sorpresa!- exclamé; con quá animal me vine a topar, estaba muy grande, la tenía muy grande, con muchas venas, se veía tan rica, -puedes probarla también si quieres- asintió, entonces empecé a chupársela toda, hice que se recargara en su escritorio, al mismo tiempo le quité el cinto y le bajé el pantalón y recuerdo que me hinqué para seguírsela chupando. Le pasé mi lengua por toda la cabeza y punta. Noté que estaba muy complacido a pesar de que no hacía ruido pero lo demostraba su cara, entonces, se levantó de su escritorio, me levantó la falda, se puso de espalda, empezó a frotar su parte trasera contra mi parte delantera. Lo hacía con tanta delicia como yo, me pidió que lo masturbara y lo hice, después, me volví a hincar y seguí chupándolo. 

Recuerdo que tenía una minifalda muy rabona de mezclilla, con unos gatitos en la parte trasera con una blusa negra de rayas blancas y ombliguera, y mi cabello suelto. Él me levantó -levántate- me dijo; me levantó la falda y entonces empezó a hacerme sexo oral mientras tocaba mi parte trasera, al mismo tiempo introducía los dedos en mi pequeño hoyito e hizo que me viniera, y después se empezo a masturbar -chúpala de nuevo- añadió, -ya quiero venirme- siguió; gemía mientras se venía en mis labios. Terminó y terminamos los dos, nos lavamos las manos ya la boca como si no hubiera pasado nada, entonces me dio la receta de lo que necesitaba y me dijo vuelve pronto que te estaré esperando, entonces fue mi sorpresa cuando mire la hora, porque era las 9:10 p.m. y yo entré aproximadamente a las 7:16 p.m., y había más personas afuera esperando, entonces me dio pena porque nos miraban extraños y más a mí que parecía haber salido de un burdel, entonces salí de ahí, me encontré a mi amiga, estaba aun en el centro comercial esperándome, le conté lo que pasó y me dijo -no puedo creer que haya cambiado en tan poco tiempo- siguió -¿entonces qué harás?-, -pues marcharme, estoy contenta que hago aquí- respondí, entonces me despedí de ella. 

FIN...

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SERENIA

SERENIA LILITH ANDRADE

HOLA... SOY SERENIA... ¿QUIERES SABER QUIÉN SOY? DÉJAME CONTÁRTELO ASÍ... SOY UNA CHICA ESPECIAL DE NUEVO LEÓN, MONTERREY... ¿ESPECIAL? SÍ...